Cada minuto, segundo de la tan corriente y a veces poco apreciada inhalación y exhalación, son los momentos más sagrados y en comunión que se puede tener con uno mismo. Aprender a valorarlo, entender que la respiración es aquello que nos mantiene en permanente contacto con la vida, es lo más sublime que he podido sentir. Y ni siquiera debemos desearlo, simplemente sucede, el aire baña nuestras fosa nasales, entra y sube, luego desciende a nuestros pulmones para luego volver a salir, muy sencillo para ser verdad, para ser una verdad tan bella, tan simple, y es el aliento del Universo diciéndonos: “ estas vivo”, “ la energía mágica de la vida corre por tu ser”. ¿Es complicado ser conscientes de todos los procesos que nuestro cuerpo realiza a cada momento, sería muy desgastante estar pesando en las veces que el corazón bombea sangre o que los riñones la lavan o cosas por el estilo, pero la respiración es tan sutil y cercana que es más difícil no sentirla y cuantas veces nos encontramos sintiéndola??… pocas pensaría yo.
¿Qué es lo que separa la vida de la muerte?… una respiración, un instante místico. No sé qué habrá después del último respiro, no sé si es como dicen algunos…. Pero lo que sé es que cuando no respiremos más, solo nos quedara morir.
¿En mis ultimo instantes, cuando ya no haya más miedos y los apegos sean solo sombras, habré conquistado el deber más sagrado del ser humano, conocerse a sí mismo? es a lo que aspiro. Ser consciente de mi respiración me da algunas pistas, aunque como para que eso suceda falta un poco, continuo divagando entre mis lados oscuros y el descubrimiento de mis sombras.
“La vida de cada persona es un camino a sí misma, el intento de un camino, la insinuación de un camino”. Este autor me ha llevado a sentimientos muy profundos, con su toque melancólico y de agonía permanente, la obra de Hermann Hesse, en su novela, según muchos autobiográfica “Demian”, es un claro ejemplo del autodescubrimiento de una persona y de temas tan de moda hoy en día, como la espiritualidad.
Pero realmente que es la espiritualidad, talvez desde la óptica religiosa se tenga una definición clara y profunda, lo dudo, pero igual no es la que me interesa. Considero que llegar a saber que es lo espiritual, como se alimenta, a que sabe, deberá ser autónomo de otros conceptos históricos., incluso filosóficos. Discernir sobre este tema, solo adentrándose en uno mismo, deberá ser la línea, de lo contrario, el riesgo a caer en cómodas ideas o credos, será mayor.
Una vez leí a Gonzalo Gallo, gran sabio y escritor, lo siguiente: “Que es ser espiritual? Es sintonizar con su esencia, trascender, interiorizar y dejarse guiar por el Espíritu Divino…. Y remataba con la frase “Sea espiritual, aunque no sea religioso””. Esto me encanto y aunque ese escrito fue hace más de 20 años, aun lo conservo y me reafirma muchas cosas, la más importante para mí, que la espiritualidad radica en entender quiénes somos, en saber que el camino es como la vida misma, a veces tropiezas y entonces te levantas, respiras profundo y cada vez te apropias más de lo que realmente eres. Y un día casi sin pensarlo, en el cielo profundo de tu alma sabrás que pase lo que pase, al final todo saldrá bien.